viernes, 8 de julio de 2016

Ver el Atonium

Una de las cosas que puedes ver cuando visitas Bruselas es el Atonium. Me quede con ganas de verlo en mi primera visita pero no pude ir por la nube volcánica del Eyjaftjalla, que me hizo adelantar mi vuelo de regreso para poder cumplir con un compromiso profesional.

De todas formas, en mi siguiente viaje a Bélgica (viaje belgica y holanda) fuimos a verlo. En 1958 la energía atómica era considerada negativa, asociándose a las bombas de Hiroshima y Nagasaki. Europa se hallaba dividida en dos bloques enfrentados que Vivian en una tensión continua. En uno de ellos, el occidental, se comenzaba a fraguar el movimiento europeísta, cuyo centro era Bruselas. Fue precisamente aquí donde aquel mismo año se celebró una Exposición Universal, que ha dejado otros monumentos importantes en otros países como la Torre Eiffel de 1889.

Los belgas apostaron por un monumento basado en el átomo, representando la vertiente pacifica de la energía nuclear. Lo diseñó Waterkeyn y tiene 102 metros de altura con nueve átomos de un cristal de hierro aumentados 165000 millones de veces.

El conjunto consta de ocho esferas de 18 metros de diámetro estructuradas alrededor de otra esfera central, todas ellas comunicadas entre sí por tubos, de dónde viajas de esfera en esfera por dentro con escaleras mecánicas o físicas. Dentro algunas escaleras tenían luces un poco psicodélicas.

El plan original era que todo el peso descansara sobre el tubo central, pero las tensiones eran mayores de las esperadas así que se añadió soportes debajo de tres de las esferas.

Dentro es una especie de museo dónde comienzas subiendo en ascensor y vas recorriendo diversos pisos, tienen un mirador, escaleras con luces psicodélicas, etc.




Es original, aunque para ver una vez en la vida, tampoco hay que exagerar. Lo que sí que puedes hacer es ir a verlo también de noche, siempre y cuando lo iluminen, ya que si ves las imágenes en internet, están bonitas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario