En Sintra podrás deleitarte
con dos dulces típicos, ya que no todo es bacalao.
Uno era las queijadas en la
Piriquita que son pasteles de queso aunque nos parecieron un poco duros y
sosos, y nos quedamos con los pasteles de Belem.
Como cuenta la propia página
web de la pastelería, la Piriquita nació en 1862, donde trabajaban Amaro dos
Santos y su mujer. El nombre del establecimiento vino del sobrenombre que le dio
el rey Carlos I a la mujer, Constancia Gomes, por su baja estatura. El propio
rey les indico que le crearan un postre que fueron las queijadas, y que el rey
comía siempre en sus veranos en Sintra.
En los 40, la nieta del
fundador creo el siguiente dulce típico, los travesseiros, cuya receta secreta
como con las queijadas la guardan la familia, que ya van por la quinta
generación en regentar la pastelería.
Este lo probamos más tarde
en una cafetería en plena plaza central, y estaba bastante bueno. Es un bollo
hecho con almendras, hojaldre, huevos, azúcar y un poquito de canela por
encima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario