En nuestro recorrido por
Holanda (Viaje Belgica y Holand) incluimos un pequeño pueblo llamado Giethoorn, a dos horas en
coche de Amsterdam, ya que lo vimos en algunos foros y blogs de viaje y nos pareció
único. Después de que veáis las fotografías, lo incluiréis seguro en vuestra
ruta¡¡
Es un sitio idílico, con casas
preciosas, todo lleno de canales y muy tranquilo. Se le conoce como la “Venecia
del Norte” y tiene más de 180 puentes. La parte vieja de la ciudad no tiene
carreteras y sólo puedes moverte en bicicleta o barca. Nosotros fuimos
originales y alquilamos una bicicleta,
así que decidimos ir hacía el centro, aunque no avanzábamos mucho ya que a cada
pedalada veíamos una imagen de postal y parábamos a hacer la consecuente
fotografía. Es totalmente indescriptible…Así que nos volvimos unos paparazzi
locos y no pudimos llegar al centro, dando un pequeño paseo por los alrededores
del hotel.
Después de comer, fuimos
otra vez con las bicis dirección centro, aunque en eso vimos unas barquitas y le preguntamos al señor si
las alquilaba y nos dijo que si, así que le dejamos las bicicletas en el jardín
y cogimos la barca por 3 horas dando un tranquilo paseo en ella. Te la dejan
sin explicar prácticamente nada y allí te lanzas a la aventura. La verdad que
era fácil de dirigir y nos fuimos alternando. Con esta barca empezamos a
recorrer los canales y una reserva natural donde se veían aves que es parte del
Parque Nacional de Weeribben-Wieden. Tuvimos mala suerte ya que se escondían
cuando nos veían, salían movidas, pero bueno, se pueden ver patos, aves, vacas,
etc. Te dan un mapa con colores según la ruta y las horas que te va a llevar en
hacerlo así que ibas siguiendo el mapa y los postes de los canales que tenían
colores y flechas para ver el recorrido. Parece fácil, pero hay en varios
puntos que llevas media hora en una dirección y piensas que ya te has
equivocado hasta que aparece la bifurcación que has visto en el mapa :) Aparte
la barca va muy despacito y cada x te tienes que parar ya que se va atascando con
algas y hojas que hay en la superficie del agua y debes quitarlo para poder
seguir avanzando. Aun así, tardamos justo lo que nos había anticipado el señor,
así que está totalmente estudiado.
Después de la reserva
llegamos a un gran lago. Aquí fue donde nos perdimos, ya que nos parecía que
había que ir recto, pero luego resulto que la salida que debíamos coger estaba
en un extremo muy alejado del lago.
Ya una vez en el camino
correcto, fuimos por los canales viendo el centro del pueblo, lleno de casas, puentes,
algunos tan bajitos que tenías que agacharte y tirarte sobre el suelo de la
barca para pasar. Con respecto a las casas, destacar que los tejados de paja
los cambian cada temporada como pudimos comprobar en alguna que estaba a
medias. El pueblo se estableció aquí para el transporte del extracto de turba.
Consejo
final: Si tienes algo de tiempo, inclúyelo en tu itinerario
ya que es un pueblo realmente espectacular, muy tranquilo, sin muchos turistas,
y que parece salido de un cuento de hadas.
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