Cuando preparamos nuestro
viaje a Bélgica y Holanda (Viaje Belgica y Holanda), vimos que actividad especial hacer y cuando
vimos la zona de Durbuy y que allí había opción de quad no lo dudamos un
momento.
Cogimos
un recorrido de más de dos horas de quad,
en donde estuvimos recorriendo el paisaje, alternando bosques, carreteras,
campos cultivados, vacas, pueblos, paisajes, y hay que reconocer que era
extremo y nada que ver con el que habíamos hecho en Camboya (quad Camboya). Los quads
eran más nuevos y cogías fácil los 70-80 por hora, la parte de los bosques era
por pequeños caminos de montaña llenos de raíces, piedras, grandes cuestas, que
eran muy complicados de hacer. Íbamos con otra pareja, cada uno en un quad, y la
chica era muy torpe, se le quedaba cada dos por tres en las cuestas, casi
volcamos por su culpa al tirarse contra
nosotros porque se le metió en una raíz y no salía el quad…
Casi
al final del recorrido vimos los Weris, que son megalitos que incluyen dólmenes
y mehires, aunque la foto es un poco borrosa. Destacan el Gran Dolmen de Weris,
el Menhir Danthine, el Dolmen de Oppagne, los tres mnehires de Oppagne y el
Tour Menhir (destruido).
Por
la tarde hicimos kayak, que esto al
contrario del quad, fue un pequeño fiasco ya que el rio estaba sumamente bajo
en algunos puntos y no nos avisaron, con lo que el kayak se quedaba atascado en
muchos puntos y había que hacer una
barbaridad de fuerza para poder sacar el kayak de las piedras del fondo dónde
se atascaba. Incluso en algún punto hubo que bajar y empujar el kayak…Aparte de
eso son 8 km de recorrido que es
bastante largo, sin ningún punto donde puedas irte y que te lleven hasta la
entrada. Lo que no sabemos es cómo lo haría la gente ya que muchos con los que
nos cruzábamos eran niños, o se los veían poco hábiles, muy tranquilos.
Nosotros tardamos más de dos horas a
buen ritmo, y llegamos cansadísimos del estrés y del esfuerzo. Lo que era
muy bonito era el paisaje, ya que el recorrido es entre montañas, con gran
vegetación, pasando incluso al principio por delante del castillo de la ciudad.
Luego al final le cogimos el tranquillo y sabíamos pasar los mini rápidos y
piedras sin atascarnos viendo por donde caía más fuerte el agua, o como se
movía la superficie, etc.
Fue
una experiencia única, la pena es la mala organización de Durbuy Adventure, ya
que nadie sabía nada, intentamos comer en el complejo y no había ningún sitio
abierto, casi nadie hablaba inglés, ni siquiera el instructor del quad, por el
que hablamos con señas, no nos avisaron que el rio estaba muy bajo en algunos
puntos para hacer kayak, en fin, un poco de lio que deberían de arreglar…
Consejo
final: Si te gusta hacer experiencias de este estilo y vas
con coche por Bélgica, merece mucho la pena hacer quad porque los paisajes son
preciosos y además es quad de verdad por caminos remotos de montaña con los que
no podríamos pasar de otra forma.
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