sábado, 12 de diciembre de 2015

La historia del árbol de Navidad

Por qué decoramos el árbol de Navidad? Para todo aquel que disfrute de la Navidad y se haya hecho esta pregunta, aquí viene la explicación.




Yo la descubrí leyendo muchos foros diferentes cuando hice un viaje a la Alsacia Francesa  ya que provienen de esta región. A lo largo del tip podéis ver diversos ejemplos de árboles de varios viajes navideños que he hecho.


Aquí fue donde empezaron a decorarse en el siglo XII, aunque la primera mención documentada del abeto es del 1521 en esta región de Europa.

El 24 de diciembre, con motivo del pecado de Adán y Eva, comenzaron a colocar un abeto en el coro de las iglesias, simbolizando el árbol del paraíso lleno de manzanas que recordaba a la fruta de la tentación. Después fueron añadiendo otros elementos como las hostias, símbolos eucarísticos y frutos de la redención. A comienzos del siglo XVI, los cristianos comenzaron a hacerlo en sus propias casas e iban metiendo abetos o pequeñas ramas. Al poco tiempo, añadieron manzanas rojas llamadas christkindle.

Desde finales del siglo XVI se continuaron añadiendo adornos, al principio con significado religioso, como hojas de metal doradas que recuerdan al árbol de Jessé que representa la filiación de Cristo y también la Rosa de la Navidad. Existen también documentos refiriéndose a una fiesta del 24 de diciembre de 1510 en Riga donde se indica que los mercaderes y comerciantes bailaban alrededor de un árbol decorado con rosas artificiales antes de proceder a su quema. A partir de 1546, el Ayuntamiento de Selestat, en Alsacia, autoriza a sus ciudadanos a cortar abetos para la festividad del Nacimiento, en la noche de Santo Tomás, el 21 de diciembre. En aquellos tiempos, la Iglesia Católica consideraba el árbol de Navidad como una práctica de los ritos paganos y franco masones y mucha gente muy creyente lo sigue considerando hoy en día pensando que sólo hay que colocar el belén. Algunos, vemos aparte del símbolo una oportunidad para dar rienda suelta a nuestra vena decoradora, ya que es un elemento muy bonito que puedes decorar de múltiples maneras. En 1560 los protestantes rechazaron representar la natividad con el belén de los católicos, así que se extendió su uso por toda la Europa Protestante, sobre todo Alemania y Escandinavia.



En el siglo XVI-XVII se coronaría el abeto navideño con la estrella de los Reyes Magos. Más tarde, a finales del siglo XVII, se añadieron dulces pasando a usarse nueces doradas y plateadas y sustituyendo las hostias por galletas de navidad.



A finales del siglo XIX se empezaron a añadir angelitos de cera, que era un articulo de lujo. En el Palacio de Versalles se puso por primera vez en un ambiente oficial el árbol de Navidad, por orden de la reina Maria Leszczynska de Polonia, introduciendo la costumbre de Alsacia donde había pasado sus últimos años de soltera. En España lo introdujeron Carlos III y su esposa sajona, Elena de Mecklenburg-Schwerin.


Otra leyenda cuenta que la historia del árbol de navidad viene de un sacerdote de Alsacia muy generoso que vivió hace 400 años y que cada noche de Navidad repartía alimentos, ropa y dinero entre los vecinos desfavorecidos de su pueblo. Un día, admirando la noche estrellada, se le ocurrió colgar los presentes en las ramas de un abeto cercano a la iglesia del pueblo. De esta forma, los más pobres podrían recoger sus regalos mientras disfrutaban del cielo estrellado y cantaban bajo el árbol cánticos sagrados. Esta idea resultó todo un éxito y se convirtió en una tradición.

Con respecto a la distribución, en el último crucero a los Fiordos Noruegos, aprendimos que Dinamarca, de dónde salía el crucero, es el segundo exportador mas grande de árboles de Navidad del Europa. Tienen granjas especiales donde los cultivan, que yo ni sabia que existían, pero que investigando en internet, ves que es una costumbre muy extendida en algunos países como EEUU o Canadá. Se cultivan principalmente pinos, piceas y abetos. La primera granja del mundo apareció en 1901, aunque la gente empezó a tenerlos en sus casas provenientes de las granjas en los años 40. Con esta práctica, se le da uso a las tierras de labranza de baja calidad. A comienzos del siglo XXI, cerca del 98% de todos los árboles de Navidad naturales vendidos en el mundo fueron cultivados en granjas especializadas. Y si no te convence un árbol natural, siempre queda la opción de uno artificial que suelen aguantar mejor las altas calefacciones de las casas de hoy en día.

Consejo final: Si adoras tanto la Navidad como yo y no has visitado la región de la Alsacia, merece la pena que hagas ese viaje en Diciembre.

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