El pasado puente de diciembre
decidimos hacer una pequeña escapada a Andorra (viaje andorra). Cogimos un hotel bastante céntrico,
así que, al salir a caminar, vimos una escultura que nos llamó la atención.
Enseguida se reconoce que es
de Dalí, y la verdad que no tenía ni idea de su existencia pero me encanto
poder contemplarla.
Está situada justo entre las
principales calles comerciales, en la plaza denominada la Rotonda que data del
siglo XII.
La escultura representaba
uno de sus famoso relojes derretidos que se llama la “Noblesse du temps”, la
nobleza de los tiempos. Fue donada por Sabater en 1999 al país.
Fue realizada entre 1977 y
1984 y es de bronce, con casi 5 metros de altura y más de 1500 kilos. Es increíble
como con ese material pudo hacer una escultura de esta forma, ya que se aprecia
totalmente las dobleces, te da la sensación de estar derritiéndose y fundiéndose
con el entorno, así que me quede maravillada viéndola como me paso cuando he
visto grandes obras de arte hechas en mármol como el David, donde piensas que
cómo podrán tener esa maestría para tratar esos materiales tan difíciles y
manejarlos de forma que reflejen movimiento, dobleces, de una forma tan soberbia.
Representa un reloj
derretido que simboliza el paso del tiempo con un tronco detrás y una corona
encima que refleja el dominio del tiempo sobre las personas. Se pueden ver
otras estatuas parecidas en Shangai, Londres o Suiza.
La verdad q impresiona un monton. Era la primera q veia en persona de este artista y es algo unico al natural 😁
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